¿Cuánta potencia de luz necesito contratar en casa?

Depende de lo que necesites. Contratar la potencia eléctrica adecuada es una de esas decisiones pequeñas que marcan una gran diferencia. ⚡ Si te pasas, pagarás más cada mes por algo que no usas. Si te quedas corto, el interruptor de la luz saltará justo cuando estés cocinando, lavando y viendo la tele a la vez. En esta guía te ayudamos a calcular cuántos kW necesitas realmente para que tu factura y tus nervios estén a salvo. 😅

Antes de tocar nada, mira tu factura. Ahí verás cuántos kW tienes contratados ahora. La mayoría de hogares españoles se mueven entre 3,45 y 5,75 kW, pero no es una cifra mágica: depende de tu casa, tus electrodomésticos y cómo los usas.

Electrodomésticos que mandan

Cada aparato tiene una potencia aproximada. Por ejemplo:

• Vitrocerámica: 1,5 - 2,5 kW

• Horno: 2,0 - 2,5 kW

• Lavadora: 1,0 - 2,0 kW

• Aire acondicionado: 1,0 - 2,5 kW

• Calefacción eléctrica: 1,5 - 3,0 kW

• Cargador de coche eléctrico: 3,7 - 7,4 kW

¿La clave? No se usan todos a la vez. Aquí entra el famoso “factor de simultaneidad”: normalmente, solo usamos el 30% de toda la potencia sumada. Así que:

1. Suma la potencia de los aparatos que usas con frecuencia.
2. Aplica un factor de simultaneidad (entre 0,3 y 0,4).
3. Añade 1 kW de margen de seguridad.

🔍 Por ejemplo: una familia con horno (2 kW), lavadora (1,5 kW), aire acondicionado (2 kW), nevera (0,3 kW) y microondas (1 kW) suma unos 6,8 kW. Aplicando un 30% de simultaneidad: 2,04 kW + 1 kW de margen ≈ 3,0 - 3,5 kW recomendados.

¿Qué potencia es la recomendada según tu hogar y estilo de vida?

Pues no es lo mismo vivir solo en un piso pequeño que en un chalet con familia numerosa y coche eléctrico. Aquí tienes una guía aproximada para orientarte:

¿Y si me paso o me quedo corto?

• Si contratas menos de la necesaria, se irá la luz cuando pongas varios aparatos a la vez (saltará el ICP). Nada divertido.

• Si contratas más de la necesaria, pagarás más todos los meses sin aprovechar esa potencia extra.

Lo ideal es ajustar bien con un pequeño margen. Desde hace unos años puedes contratar potencias en escalones de 0,1 kW (antes solo se podía en tramos como 3,45 o 4,6), así que puedes afinar mucho más.